No sé qué
me pasa hoy, si la indignación que me llena es culpa de “Martes locos” en mal
estado o a lo poco productivo del día… Pero no entiendo nada.
No
entiendo por qué ante una actitud clara, sincera, amigable, lo que viene siendo
un ‘de buen rollo’... La respuesta siempre son verdades a medias, cambios de
actitud, insinuaciones, dobles sentidos y buscar culpables donde no los hay…
La
clave es: una de cal, una de arena, hoy sí, mañana no… La verdad, nunca entendí
esos juegos y cada vez los entiendo menos, ¿por qué los que más nos quejamos de
ellos somos los que más jugamos?
No
entiendo esta manía nuestra de complicarnos tanto la vida (yo la primera), con
todo y con todos. ¿Por qué no permitirnos el lujo de hacer lo que se nos
apetezca y cuándo se nos apetezca? Pues no, eso no vale, porque cuanto más
fácil tienes algo más problemas le ves en medio y eso es así (y las papas son
asás…asín asán…)
No me
gustan los problemas, los enrreos, las verdades a medias, las insinuaciones.
Soy más de lo que viene siendo ‘las cosas claras y el chocolate espeso’. Pero
bueno, si todo el mundo se empeña en seguir así, qué queréis que os diga: yo no
pienso cambiar, aunque vaya al contrario de todos, ya nos cruzaremos en el
camino.
Estoy
enfadada, con el mundo en general y con nadie en particular y tenía la
necesidad de chillar o de escribir, he pensado en mis vecinos y ha salido esto
sin mucho sentido ni orden ni significado (dejad de leer entre líneas, lo que
hay es lo que hay, simpleza 100%)
Bueno,
ahí lo dejo! Hasta el próximo cabreo!