miércoles, 1 de junio de 2011

Evaluación de la memoria

Que caprichosa es la memoria, nos permite acordarnos de miles de canciones, somos capaces de revivir sensaciones que sólo no pareció percibir algún día, pero que cuando regresan, ya no se nos antojan nuevas, permitiéndonos vivirla con mayor intensidad si cabe… Memoria caprichosa que hace que no recordemos el dato, la frase clave para responder la pregunta de un examen…

Memoria que perdemos en beneficio de la sobreinformación que nos llega. Esta es nuestra era, la era de la información donde conocemos los detalles de una noticia a los pocos minutos de que ocurra, donde gracias a las redes sociales, España es noticia por una revolución.

Pero, ¿qué pasa con las noticias que ya no son de rabiosa actualidad? ¿Dónde se guardan? En las bibliotecas, en las redacciones de periódicos, de informativos hay habitaciones llenas de ediciones antiguas llenas de noticias olvidadas… Noticias olvidadas que antes, al menos, ocupaban habitaciones, pero ahora, son solo unos pocos megas en algún disco duro de algún ordenador en alguna habitación de alguna redacción…

Es cierto, sería imposible sacar un periódico toda la progresión de todas las noticias sobre las que se escriben diariamente… tampoco habría tiempo en un telediario para ver todas imágenes de todo lo que pasa y de lo que va pasando… Quizás es que sean muy necesarios los anuncios o quizás no interese que ciertos temas sigan de actualidad. O quizás hayamos llevado hasta el extremo el concepto de “rabiosa actualidad” preocupándonos solo de aquello que está de moda.

¿Qué ha pasado con Japón? ¿Han podido ya los eficientes y trabajadores japoneses reconstruir su país? ¿Se ha conseguido solucionar el desastre nuclear? ¿Qué va a pasar con el resto de centrales? ¿Tiene ya Haití todos los recursos necesarios como para, al menos, volver a su situación anterior? ¿Qué ha pasado con Lorca? ¿Ya se han derribado todos los edificios? ¿Han podido realojar a las familias? ¿Se sabe por qué un terremoto de una intensidad causa daños correspondientes a otra mucho más superior? Y lo que es aún peor, ¿siguen los ‘indignados’ confinados en sus plazas y calles? ¿Qué avances están consiguiendo sus propuestas?

No pasa nada si no se conoce la respuesta a algunas de estas preguntas, seguro que la próxima edición del telediario aparece algún anuncio en forma de noticia acerca de los beneficios que tiene usar gafas de sol en verano, o qué bien está cierto destino vacacional… Pues estamos viviendo la era de la información de actualidad, que traducido resulta, la era de...la desinformación amnésica.

1 comentario:

  1. Estoy de acuerdo contigo Sumsita!!! No es que antes no hubiera la misma cantidad de noticias, sino que antes a cualquier noticia se le sacaba todo el rendimiento del mundo. Ahora cualquier noticia banal eclipsa a una verdadera noticia...y la gente ya está acostumbrada...Cuánto vale la vida de una mujer maltratada? Si tiene suerte unos 20 segundos de noticia, si tiene un poco menos de suerte, un número en algún artículo de algún periódico que haga algún tipo de recuento...Si se gana el artículo en el periódico, créeme, dará pelos y señales de cómo, por qué, dónde, cuándo...todo...porque eso es lo que le interesa a la gente o eso es lo que creen que les interesa.
    Las noticias tiene una fecha de caducidad enorme y las hemerotecas se llenan de recuerdos que ya a nadie le interesan...
    Suena un poco penoso, pero es mejor verlo como una evolución a verlo como un atraso...

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